Inicio una serie de entradas para comentar el modelo de madurez de la dirección estratégica.
Muchas empresas trabajan para mejorar su dirección estratégica. La pregunta que se deben hacer es:
¿ Dónde estamos en comparación con otras empresas que tienen un alto desempeño ?
Realmente, es díficil contestar a esta pregunta, aunque es clara la necesidad de que la empresa evalúe la calidad de su dirección estratégica.
Existe un modelo diseñado por y para los directivos, digamos, más ocupados, y que necesitan una rápida evaluación de dónde se encuentran sus empresas desde el punto de vista de la dirección estratégica, para analizar su progreso en la mejora de la madurez de esa dirección estratégica y para permitir el benchmarking para identificar las mejores prácticas. En anteriores entradas desarrollé el concepto de benchmarking estratégico.
Hay dos preguntas básicas que hay que hacerse en relación con la dirección estratégica :
1. ¿ Estamos haciendo las cosas bien ?
2. ¿ Estamos haciendo las cosas que tenemos que hacer ?
La dirección operativa se centra en hacer las cosas bien y para ello se han desarrollado muchas herramientas para la mejora en este aspecto , tales como la calidad total, Six Sigma o la reingeniería de procesos.
En el desarrollo del modelo de madurez de la dirección estratégica, el concepto desempeño ha sido ampliado para añadir elementos de dirección estratégica que podrían contestar a la segunda de las preguntas anteriormente indicadas, ¿ estamos haciendo lo que tenemos que hacer ?.
En cualquier empresa, es la estrategia, dirigida desde la vision del liderazgo, la que debe definir cúales son las cosas que hay que hacer. La mejora de los procesos, no puede garantizar por sí sola, que una empresa tendrá éxito.
Estos dos aspectos de la dirección, estratégico y operativo, se complementan entre sí, y por lo tanto ambos deben ser evaluados para determinar las capacidades de dirección de una organización.
En el inicio del blog presento el esquema del modelo de evaluación de la madurez de la dirección estratégica, que comentaré en las próximas entradas, con sus distintos niveles.